$37 Millones Para Una Persona Con Problemas Mentales Baleada Por La Policía

Veredicto: $ 37,000,000

HECHOS Y ALEGATOS

Una persona de 50 años de edad con un problema mental en Queens, Nueva York, fue baleada por oficiales de la policía que vigilaban la zona. El demandante, que hablaba únicamente español y que tenía el comportamiento de un niño de nueve anos de edad, recibió dos impactos de bala en el pecho, después de que la policía se percatara que poseía algo similar a una pistola en su ropa.

 

En el día de la balacera, el demandante había sido enviado por un compañero del negocio de lavado de autos a comprar cigarrillos a la estación de servicio, ubicada al cruzar la calle. Al momento de cruzar la Avenida Queens Boulevard y de regreso a su centro de trabajo, las luces de tráfico comenzaron a cambiar. En tanto que dos agentes de la policía se encontraban en su patrulla muy cerca de dicha luz. Uno de ellos, hizo una señal con su mano hacía el demandante, para pedirle que se apurara antes de que las luces del semáforo cambiara.

El demandante no entendió lo que el policía trató de decirle, pensando que le había pedido acercarse a la patrulla. Cuando el demandante hizo eso, los oficiales le dijeron que se apurara a cruzar la calle. El demandante encogió sus hombros y levantó las palmas de sus manos como para indicar que no había entendido lo que le habían dicho. Fue en ese momento que los policías se percataron que el demandante poseía un arma de plástico (el cual creyeron que era real) en su ropa.

En el momento que el demandante retornaba a su centro de trabajo, en el negocio de lavado de autos, los dos oficiales salieron de su patrulla con sus pistolas desenfundadas para pedirle que no se moviera. La policía dijo que el demandante dio una vuelta y sacó su arma, al tiempo que los oficiales realizaron un movimiento de autodefensa tipo militar.

De acuerdo a los testigos, el demandante simplemente se dio la vuelta, con nada en sus manos. Sin embargo, por algún motivo, uno de los oficiales disparó, hiriendo al demandante en dos ocasiones. El abogado que representó a la ciudad para dicho caso sostuvo que los policías no tuvieron la forma de saber que el demandante poseía una pistola de juguete entre su ropa y que eso fue una razón suficiente como para sentirse amenazados.

 

DAÑOS Y HERIDAS

El demandante sobrevivió a los disparos, pero sufrió de un colapso a su pulmón, costillas rotas e incontingencia. El punto central durante el juicio fue que la policía había mostrado un exceso de fuerza. Gracias a las declaraciones de algunos testigos y de evidencias circunstanciales, los abogados del demandante se mostraron confiados de mantenerse en el asunto de responsabilidad legal.

Un vendedor de una agencia de autos, ubicado al lado del negocio de lavado de autos y quien fue testigo de la balacera, testificó que el demandante no poseía nada cuando dio la vuelta. Posteriormente, los testimonios médicos indicaron que si el demandante hubiese sacado una pistola –tal y como la policía alegó- era muy poco probable que las balas le hubiesen dado en el pecho.

 

RESULTADOS

El jurado en el caso compensó al demandante con $37 millones por las heridas que sufrió a causa de los disparos de la policía.